4/10/10

Los tallarines con sabor a gloria

Hace días quería escribir en algun lugar. Me daba paja registrar otro blog, así que voy a escribir en este.

Anoche a eso de las 23:00 nos las emplumamos hacía una disco - A lo que sería una entre otras noches de mi vida pero digna de destacar - Como es de costumbre tenía que salir ya con un poco de alcohol en la sangre y me tomé una botella de pisco sour que me regaló una amiga. El target era embriagarme para olvidar aunque fuera un rato lo penca que es mi vida -Nunca me cuesta mucho - Así que entré en la cuestión esa donde ponen puro reggaeton (Que no sé bailar), saludé a los guardias y PLUF! entré gratis denuevo. (Sí, Sergio lo ha hecho denuevo) La cosa no solo es hablar de mí. Tambien andaban dos amigas.

- Oye hueón no vay a tomar tanto que no te queremos llevar vomitando de vuelta.

- No, si me voy a ir despacito.

Las minas siempre tienden a fastidiar los planes de uno. Pero la noche recien estaba empezando y yo seguía con las esperanzas de quedar completamente ebrio.

Supongo que como a las 3 de la mañana me encontré con ese amigo de la infancia que la pubertad nos separó y el alcohol reunió. Fueron mas menos seis o siete ron cola (O piscolas) Cuando siento que me tiran el brazo.

- ¿Vamos a mover la patita? (Mis dos amigas)

-Pero como le va puéh (Yo)

Nos fuimos pal medio de la pista de baile mientras tocaban unos temas de axé bahia. con el sangoloteo ya sentía los acidos de mi estomago en la garganta. Así que aproveché cuando fueron a mear (Por que van a mear de a dos) pa irme de nuevo por un vaso que calmara mi sed.

Aquí debería ir una parte de la historia que es nebulosa

Ya estaban tocando los lentos en la cuestion y un amigo me dice:

- Sergio hueón vamos donde unas minas

- Ya po ¿hay copete?

- Llevamos unas botellas de pisco

- De ahi somos zorrón

Partimos de la capital neuralgica de el carrete provinciano, dejamos a las lolas (Mis amigas) en sus respectivas casas (Tenían frío) y llegamos a la casa de las connotadas señoritas. (Que de connotadas no tenían mucho)

Las llevamos a el palacete de mi amigo, servimos los copetes y ¡zuacate! Logré mi objetivo… No sé si me curé en un segundo o eso fué lo que me demoré en darme cuenta. Pero estaba feliz mientras escuchaba hueonas tosiendo y bramando canciones de arjona.

Din Don!

- Estan tocando la puerta!!! (Mis tallas fomes de curao)

Por el umbral cruzó el hueón con mejor olfato pa carretes de toda la comarca y le dije:

Guatón culiaaaaoooorghh!! hacete unos tarallineh pal bajón poh

(Yo mandaba nomás)

El dueño de casa en ese momento acotó

- Hueón no me queda gas

- Puta entonces haguemolos en el hervidor po’ yo no me quedo cagao de hambre

Entre cigarros y más copetes llegaron los tallarines mas ricos que he comido en mi vida, me los engullí en menos de 20 segundos y pregunté la hora.

-Son las 9:30 (respondió alguien)

-Ah entonces me voy a dormir

DISCLAIMER

De las hueonas no supe más. No cacho como se llaman ni donde viven, mi intención era curarme y lo logré. Puede que algunos culiaos me tachen de maricon por no pescar a las hueonas. En mi defensa debo decir que eran picantes. A una le dio ataque de tos y echó un gargajo en el cenicero.

FIN

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